Terberg Benschop, una empresa con sede en Países Bajos, construye tractores especiales de carga rodada que se utilizan en terminales de contenedores en el sudeste asiático, entre otros lugares.
El cliente de Terberg quiere capturar la señal de velocidad del vehículo en formato analógico para utilizarla con el fin de operar un sistema de gestión de flotas. Al poco tiempo de la primera instalación, se descubrió que las especificaciones de la señal original de velocidad del vehículo no cumplían con los requisitos de la aplicación. El pulso de velocidad no era fiable y la frecuencia de la señal era demasiado alta para la aplicación a la que estaba conectada. A fin de poder brindar un pulso de velocidad fiable con una frecuencia que el sistema pudiera usar, se instaló una interfaz de pulsos automáticos (API) de Beijer Automotive.